Un añito más.... No te das cuenta y de nuevo es tu cumpleaños, eso sí, avisos van llegando: arruguitas por aquí, canas por allá, que si me duele el lumbago, que si la espalda.... Y eso que aún soy joven!! Cuando llegue a los 50 estaré para el arrastre!! Jaja. 36 otoños acabo de cumplir, llegué un 14 de octubre a las 10:30 de la mañana, fuí rápida, pensé que aquello era un tobogán y no esperé a que llegara mi padre de buscar un papel en casa que se habia dejado por los nervios de mi llegada , jeje. El día de mi cumpleaños siempre estoy algo triste, echo mucho de menos a mi padre...aquel día no lo esperé, pero ahora por mucho que lo espere.... Ya no va a volver :( :(
Alfinal el tiempo pasa y has de aprender a vivir con las ausencias. Una cenita en familia y a soplar las velas! Mi deseo? No os lo voy a contar 😋 pero supongo que es lo mismo que muchos pedimos ...
Para esa noche preparé 2 tartas, un mousse de limón y otra que lleva el título de esta entrada.
No soy muy amante del chocolate blanco, me gusta, sí, pero no me mata. Aún así la preparé por cambiar un poco y tener una nueva entrada que poder publicar. A la receta le pongo una pega: apenas sabe a chocolate blanco, predomina el sabor de la nata lo que hace que quedé un poco "sosa" de sabor si no le ponemos una cobertura potente, la receta original la lleva de chocolate negro, yo decidí cambiarla por toffee.
Vamos con los ingredientes para la base de galletas:
200gr de galletas María o digestive
95gr de mantequilla en pomada
Para la mousse:
250gr de chocolate blanco para postres
550ml de nata para montar
250ml de leche
4 o 5 yemas de huevo (100gr)
50gr de azúcar
6 hojas de gelatina neutra
Para la cobertura de toffee:
300gr de azúcar
300ml de nata líquida para montar
50gr de mantequilla
3 hojas de gelatina neutra
Empezamos!!
Molemos las galletas y las mezclamos con la mantequilla en pomada, ponemos la mezcla en un molde desmontable y aplastamos con una cuchara o con la mano (bien limpias claro está) hasta conseguir una base lo más lisa posible. Reservamos en la nevera.
Vamos ahora con la mousse.
Ponemos en remojo las hojas de gelatina.
Fundimos el chocolate.
Ponemos a calentar la leche hasta que hierva.Retiramos.
En un bol grande mezclamos las yemas con el azúcar y añadimos en forma de hilo la leche hirviendo. Pasamos por un colador la mezcla y la ponemos a fuego bajo removiendo sin parar hasta que espese muy ligeramente, añadimos las hojas de gelatina y mezclamos bien. Echamos la crema resultante al chocolate fundido, alprincipio parecerá que la cosa no va bien y que se forma como una pasta, tranquil@s, con paciencia y en poco tiempo pasará a ser una mezcla homogénea.
Dejamos enfriar a temperatura ambiente, sin que llegue a cuajar, ojo!
Por otro lado montamos bien la nata, una vez la tengamos la añadimos poco a poco a la mezcla de chocolate, con movimientos suaves y envolventes. Sacamos nuestro molde de la nevera y vertemos la mousse, alisamos con una espátula o cuchara y llevamos al congelador por 1hora.
Vamos ahora a hacer el delicioso toffee.
Ponemos en remojo 3 hojas de gelatina neutra.
En una sartén a fuego medio ponemos el azúcar hasta que se vuelva caramelo rubio, no moveremos para no formar cristales, si acaso meneamos un poquito la sartén. Mientras se hace vamos a poner a calentar la nata al microondas, no hace falta que hierva , es simplemente para evitar que nos salpique en exceso a la hora de vertirla sobre el caramelo. Cuando la tengamos se la añadimos poco a poco, importante!! Si lo hacéis de golpe se os formará una bola dura de caramelo dificil de disolver y si a pesar de hacerlo despacito (despacito quiero caminar contigo despacito lalalala) uy , perdón! Dichosa canción 😋🤣 se os forma igualmente, tened muuuuucha paciencia e ir deshaciendola poco a poco a fuego suave. Cuando tengamos una crema , retiramos del fuego y añadimos la mantequilla, mezclamos bien hasta que no quede rastro de ella. Por ultimo añadimos las hojas de gelatina y volvemos a mezclar. Dejamos enfriar a temperatura ambiente.
Sacamos nuestra tarta del congelador y vertemos el toffee poco a poco desde el centro hasta cubrir toda la superficie.
A la nevera un mínimo de 5 horas o mucho mejor de un día para otro.
Apuntes:
La tarta se comió entera, pero nadie supo decir de que era. El toffee le da un toque muy dulce, si no os gusta cambiarlo por cobertura de chocolate.
Si no dejáis enfriar la mezcla de chocolate blanco antes de añadirle la nata, ésta se os cortará y cogerá un aspecto grumoso (experiencia propia) la textura cambia pero la tarta sabe igual, yo hice una de prueba con prisas y la de mi cumpleaños , la segunda no se cortó 😅
Esto es todo por hoy! Nos vemos en la siguiente entrada, mientras tanto yo disfrutaré de uno de mis regalos, un molde de silicona de lekue que ansiaba tener 😍
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